Llegaremos a Colombo, la vibrante capital de Sri Lanka, donde comenzará nuestra aventura por esta isla llena de historia y paisajes fascinantes. Nos trasladaremos al alojamiento y tendremos el resto del día libre para descansar del viaje o dar un primer paseo por la ciudad, explorando sus calles coloniales, mercados animados o simplemente disfrutando del ambiente tropical que nos da la bienvenida.

Tras dejar Colombo, nos dirigiremos hacia Habarana, una localidad estratégica en el corazón de Sri Lanka. Allí viviremos una experiencia inolvidable: un safari en el Parque Nacional Minneriya, famoso por albergar una de las mayores concentraciones de elefantes asiáticos en libertad. El parque alberga una rica biodiversidad, incluyendo ciervos moteados, búfalos, chacales y una gran variedad de aves. Una jornada perfecta para conectar con la naturaleza salvaje de Sri Lanka. Finalizado el día descansaremos en Havarana.

Hoy descubriremos dos joyas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Por la mañana visitaremos la Roca de Sigiriya, una imponente fortaleza del siglo V rodeada de jardines y frescos antiguos. Más tarde exploraremos el Templo de Oro de Dambulla, un conjunto de cuevas sagradas decoradas con estatuas y pinturas budistas. Al finalizar el recorrido, seguiremos camino hacia Kandy, donde pasaremos la noche.

Hoy visitaremos uno de los lugares más sagrados de Sri Lanka: el Templo del Diente de Buda, guardián de una reliquia venerada en todo el país. Por la tarde, subiremos a un tuk tuk para recorrer la ciudad y sus alrededores. Nos dirigiremos al Jardín Botánico, a un centro ayurvédico donde se realiza una demostración de cocina tradicional y un masaje ayurvédico de cabeza, al mirador de Kandy, al Museo de Gemas y Joyeros, y a una fábrica de batik, técnica textil típica de la región. Luego regresaremos a Kandy para pasar la noche

Hoy partiremos hacia Nuwara Eliya, conocida como la “Pequeña Inglaterra” de Sri Lanka. En el camino, haremos una parada en la Torre Ambuluwawa, una estructura de 48 metros ubicada en Gampola, que forma parte de un complejo multirreligioso y de biodiversidad. Desde su cima, se pueden apreciar vistas panorámicas de las montañas circundantes, incluyendo el Pico de Adán y la cordillera de Knuckles.

Al llegar a Nuwara Eliya, realizaremos un recorrido en tuk tuk por las plantaciones de té, donde conoceremos el proceso de producción del famoso té de Ceilán y visitaremos una fábrica local para degustar diferentes variedades. Al terminar el recorrido regresaremos al alojamiento de Nuwara Elija.

Hoy abordaremos el pintoresco tren desde Nuwara Eliya hacia Ella, un trayecto famoso por sus vistas de plantaciones de té y montañas. Al llegar, realizaremos una caminata hasta el Little Adam’s Peak, una colina de 1.141 metros que ofrece panorámicas de los valles y campos de té circundantes. Más tarde, visitaremos el Puente de los Nueve Arcos, una obra maestra de la ingeniería colonial construida en 1919, enclavada entre la vegetación exuberante de la región. Dispondremos del resto del día para explorar el encantador pueblo de Ella a nuestro ritmo y será donde pasaremos la noche.

Emprenderemos nuestro día atravesando una ruta escénica dentro del Parque Nacional Yala, con la posibilidad de avistar elefantes incluso antes de iniciar el safari. Ya en el corazón del parque más visitado de Sri Lanka, reconocido por albergar una de las mayores densidades de leopardos del mundo, exploraremos diversos ecosistemas que incluyen bosques, lagunas y costas, donde es posible avistar elefantes, cocodrilos, búfalos de agua y una gran variedad de aves. Tras el safari, continuaremos nuestro viaje hacia Mirissa, donde nos alojaremos y dispondremos del resto del día para descansar o explorar a nuestro ritmo.

Hoy contaremos con el día libre, en el que te recomendamos recorrer en tuk tuk algunas de las playas más encantadoras de la zona, como Secret Beach, Weligama o Dalawella. También será una excelente oportunidad para visitar el mirador Coconut Tree Hill o acercarse al centro histórico de Galle para conocer su fuerte colonial y sus callejuelas llenas de historia.

Un nuevo día libre para seguir explorando el entorno costero de Mirissa. Podrás organizar el día como lo desees, puedes realizar una excursión de avistamiento de ballenas, navegación o snorkel. También podrás disfrutar del ambiente relajado de la ciudad o explorar en tuk tuk.

Hoy dejaremos atrás las costas de Sri Lanka para emprender el camino hacia un nuevo paraíso. Tomaremos nuestro traslado hacia Colombo, desde donde abordaremos nuestro vuelo con destino a Malé, capital de Maldivas. Al llegar, nos trasladaremos al alojamiento y dispondremos del resto del día para conocer los alrededores o descansar.

Hoy dejaremos atrás la capital maldiva para dirigirnos en lancha a la isla de Maafushi, donde haremos base durante los próximos días. Esta isla local combina la tranquilidad del entorno natural con una vida animada y auténtica. Al llegar, nos instalaremos en el alojamiento y dispondremos del resto del día libre para relajarnos en sus playas, recorrer el pequeño pueblo o simplemente contemplar el atardecer sobre las aguas turquesas.

Durante este día libre en Maafushi te recomendamos realizar un tour de esnórquel para descubrir arrecifes de coral, nadar entre peces de colores, avistar mantarrayas o incluso tiburones nodriza en zonas seguras y poco profundas. También es posible visitar bancos de arena en medio del mar, lugares ideales para tomar fotos y disfrutar de una experiencia única en contacto con la naturaleza maldiva.

Si lo deseás, podrás hacer una excursión a islas vecinas para conocer cómo viven las comunidades locales o participar de un paseo en barco para observar delfines en libertad durante el atardecer. También tendrás tiempo para seguir disfrutando de las playas de Maafushi, recorrer sus tiendas o descansar bajo una palmera frente al mar.

En tu último día completo en Maafushi podrás elegir cómo despedirte de este entorno soñado. Podés optar por una última salida en barco, relajarte en la playa, nadar en las cálidas aguas del Índico o simplemente contemplar el paisaje que te rodea. Una jornada ideal para cerrar el viaje con tranquilidad y belleza.

En nuestro último día nos despediremos de este paraíso tropical que nos regaló días de mar, sol y descubrimiento. Porque lo lindo de volver de un viaje es (re)conocernos en lo vivido. Cada experiencia, cada paisaje y cada encuentro nos transforma un poco. Es tiempo de regresar al lugar de origen, llevar con nosotros lo aprendido y compartir las historias que se tejieron en estas dos semanas de viaje.